¿Habéis probado la polenta?
La sémola de maíz es un cereal muy rápido de cocinar, interesante para los días cálidos en los que necesitamos refrescarnos y también muy versátil a la hora de hacer platos.
Tolerada para celíacos, con ella preparamos pasteles, tortillas, brochetas y cremas. La cantidad de caldo o agua de cocción nos dará el punto para que quede más densa (como un pastel) o podamos cocinar con ella unas croquetas.
Si queréis un acabado consistente, mezclad una parte de polenta por una de líquido al cocinar. Si la necesitáis menos espesa, habrá que añadir un poco más de agua.
Esta receta la acompaño hoy de unos azukis estofados en su propio jugo.
INGREDIENTES:
-1 vaso de polenta integral instantánea ecológica
-1 brócoli
-2 cebollas
-Aceite de oliva virgen
-Sal marina
-1 vaso y medio de caldo de verduras
-Orégano
PREPARACIÓN:
1. Partimos el brócoli en arbolitos y lo cocinamos al vapor, unos 5 ó 6 minutos, con dos dedos de agua, una pizca de sal y un chorrito de aceite.
2. Trituramos el brócoli con la batidora y le añadimos el caldo de verduras.
3. Cuando comience a hervir incorporamos poco a poco la polenta removiendo con una cuchara para evitar que se formen grumos.
4. Cuando haya absorbido toda el agua , volcamos en una fuente o molde.
5. De otro lado, cortamos las cebollas en medias lunas y las salteamos con un poco de aceite.
6. Incorporamos la cebolla sobre la polenta y condimentamos con orégano.
7. Cuando baje la temperatura, el pastel se solidifica. Cortamos en trozos y servimos con un chorrito de aceite.
NOTA: Se puede tomar caliente o fría. Si la tomamos fría, se puede acompañar con un poco de salsa tofunesa.