La cebolla es una verdura de raíz excelente para calmar los nervios. Cocinada durante largo tiempo cobra un dulzor tan intenso que podemos usarla también como confitura, sin necesidad de añadirle azúcares.
Si os gusta un aspecto más similar a la mermelada, una vez finalizada la cocción podéis darle unos toques con la trituradora para dejar una consistencia más fina. Y si la preferís más dulce, añadirle un par de cucharadas de melaza de arroz. Combina muy bien con el contraste de sabores salados.
También se le puede dar un toque cítrico añadiendo a la cocción un trocito pequeño de piel de mandarina.
INGREDIENTES:
-2 kilos de cebolla ecológica.
-Sal integral marina
-Aceite de oliva virgen
PREPARACIÓN:
1. Pelar y cortar las cebollas en medias lunas.
2. Saltear con unas gotas de aceite a fuego alto y moviendo constantemente.
3. Bajar el fuego y cocer al mínimo (mejor sobre un difusor) durante un mínimo de dos horas.
4. Pasar a un tarro de cristal y guardar en la nevera durante un máximo de una semana.
Nota: Tiene utilidad en múltiples recetas. Podemos usarla como confitura para el desayuno en tostadas de tahín y cebolla, en un pastel de arroz y verduritas o tortitas de polenta.