Elegid la pasta que más os guste para esta receta, con un acabado dulce y cremoso, que os servirá como plato relajante para toda la familia. Como siempre os digo, las recetas sencillas nos simplifican la vida y nos permiten un mayor equilibrio. Yo la he preparado con farfalle integral de espelta, pero podría quedaros muy parecida con fusilli de trigo integral o pasta de arroz o maíz si queréis un plato sin gluten.
INGREDIENTES: (Para 4 personas)
-350 gr de pasta integral, a vuestra elección
-2 cebollas dulces grandes
-1 buen trozo de calabaza redonda (siempre es más dulce que la de cacahuete)
-Aceite de oliva virgen
-Sal marina
-Nueces y piñones
PREPARACIÓN:
1. Cortamos las cebollas en trozos muy pequeños y las salteamos con un poco de aceite de oliva y sal.
2. Añadimos la calabaza cortada a cubos muy pequeñitos y dejamos rehogar.
3. Mientras se cocinan las verduras, hervimos con agua y sal la pasta, siguiendo los tiempos que indique la especialidad que vamos a preparar.
4. Retiramos la pasta del fuego, escurrimos y llevamos a la sartén con la cebolla y calabaza para mezclar todo un par de minutos.
5. Servimos con nueces picadas y piñones.
NOTA: Podéis darle un tono de contraste picante añadiendo unos trocitos de jengigre al salteado de verduras y dejar que se cocinen bien.
